RESEÑA: Aquiles o El Guerrillero Y El Asesino – Carlos Fuentes

“Tenemos nostalgia del sol. Nos acostamos a dormir cuando el cuerpo lo necesita. Pero no sabemos si es de noche o es de día. La selva de Santiago es una larga noche sin relojes.”

AQUILES O EL GUERRILLERO Y EL ASESINO – CARLOS FUENTES

AÑO DE PUBLICACIÓN: 2016

EDITORIAL: ALFAGUARA

PAGINAS: 191

ACERCA DEL AUTOR

CARLOS FUENTES

Nacido el 11 de noviembre de 1928 en Panamá. Cursó estudios en Suiza y Estados Unidos aunque la carrera de abogado la realizó en la Universidad Nacional Autónoma de México. Sus primeros escritos se publicaron en la revista Medio siglo.  Becario del Centro Mexicano de Escritores (1956-1957) preparó numerosas adaptaciones cinematográficas de obras suyas y de otros autores.

A partir de la colección de cuentos Los días enmascarados (1954) se dio a conocer con una obra donde lo fantástico colinda con lo real. Su primera novela, La región más transparente (1958), lo consagró de inmediato en los medios literarios. La muerte de Artemio Cruz (1962). Aura (1962). Terra nostra (1975) entrelaza distintos tipos de ficción y mitos. En La cabeza de la hidra (1978) ensaya una novela policiaca.

Carlos Fuentes falleció el 15 de mayo de 2012 en la Ciudad de México a los 83 años de edad.

OPINIÓN PERSONAL

Como si se tratase de un tesoro que estuvo guardado durante cientos de años, la novela póstuma de Carlos Fuentes salió a la luz causando gran conmoción en los círculos literarios. Una novela marcada por años de investigación por parte de nuestro autor que de por sí, no es una biografía, sino por el contrario es una historia fantástica marcada por una etapa de gran dificultad para el país bañado por dos océanos.

Nos muestra no solo la historia de Carlos Pizarro que llamaremos de ahora en adelante como Aquiles sino también de sus compañeros en armas. Junto con ellos forman una familia resguardada en el monte bajo los ideales que marcaron el movimiento 19 de Abril. Los cuatro reciben los nombres de los héroes de un clásico antiguo: La Iliada. Bateman es conocido como Diomedes, Fayad como Pelayo, el más afligido Iván Marino es Castor. Se nos muestra la relación de cada uno entre sí, sus inicios como grupo guerrillero resguardado en las montañas pero con la particularidad de no tener ni la más remota idea de cómo usar un fusil.

Esta guerrilla se caracterizó por realizar ataques extravagantes que los llevaron a ser un grupo con gran reconocimiento a nivel internacional. De Aquiles puedo decir que su facultad oratoria y un amplio conocimiento ideológico lo hace una persona que resulta estar por encima del común denominador aunque en su infancia hubiera sido el más “pequeño y más débil”.

Aunque el trabajo le faltaron partes que considero importante y que se fueron perdiendo con el paso del tiempo, el trabajo final nos muestra una novela con lenguaje entrañable y para el que no es conocedor del estilo de Fuentes puede resultar algo problemático, ello no significa que sea un libro ladrilludo sino por el contrario, te puede dejar asombrado con hechos marcados por misterio y suspenso.

El libro comienza fuerte, nos encontramos como testigos directos del hecho más importante del libro, puedo decir que nos proporciona una mira casi que exclusiva de los acontecimientos dados en el Avión con una mirada minuciosa, especifica, cercana, tan directa que nos logra transportar al hecho y dejarnos sin aliento. 

Lo que más llamó mi atención fue la forma en la que vemos como nuestro personaje evoluciona conforme la historia avanza y como los rasgos diferentes de cada personaje les da una singularidad que resulta curiosa porque logran toman el protagonismo con las anécdotas que cada uno tiene para contar mientras la luna llega a su punto más alto y el fuego de la fogata se reduce a cenizas en una conversación marcada por sueños e ideales.

Como novela histórica logra desarrollar un papel excelente. El testamento literario de Carlos Fuentes da una probada de lo que es este autor y el cual nos puede sumergir por espacios imaginado en diferentes entornos y que puede llegar a convertirse en nuestro escritor favorito. Con este libro dejo la brecha abierta para seguirlo leyendo, aunque en el pasado había leído poco de este autor gracias a este libro he retomado el gusto por su estilo curioso e ingenioso. Lo recomiendo para las personas que quieran consultar el paso Latinoamericano, un libro de lectura un poco más complejo o alguien que quiera iniciar a aventurarse con este autor. Sé que no se llevara una mala experiencia con los libros de este habilidoso señor.

“Los hermanos le dijeron a Aquiles:   Te vamos a acompañar en el camino.”